Sin título en el momento

Eres de mi universo el infinito

De mi corazón el motivo

Eres de mi vida la razón

Y te llevaré siempre conmigo

Tú sabes que con lealtad te amo

Que no te olvidaré ni en un millón de años

Perdona lo que he hecho en el pasado

Jamás quise hacerte daño

Como el aire cuando me sofoco

Eres tú más valiosa que el oro

Es que tal vez nunca llegues a entenderlo

Para mí siempre lo serás todo

Es que los años pasan lento

Y más cuando como yo se tiene miedo

Tú siempre me dijiste: cariño dale tiempo al tiempo

Hoy sé que tenías razón, la noche apagó el fuego

Por ahora sin título

Y es que tú me quitas el impulso, cariño me miras a los ojos y sin decir nada me arrebatas las ganas en un segundo.

De querer amarte paso a querer odiarte, eres el sueño de mis pesadillas, eres aquella a la que maldigo cuando siento cosquillas, preciosa eres como una enfermedad, no sé cuando llegas ni cuando te vas, me atacas simplemente cuando quieres, y abro los ojos… pero ya no estás.

Eres la dueña de mis impulsos, eres tú la que genera en mí los deseos más oscuros.

Es que con tu mirada entras por mis ojos y penetras mi piel, es que cuando me hablas rasgas mis oídos y lastimas todo mi ser, es que cuando tú quieres, me enamoras una y otra vez, es que soy un maldito juguete, con el que juegas una y otra vez.

Ni una barbie ni un muñeco de voodoo, un simple juguete de carne y hueso soy yo.

No te cansas?

Siempre juegas con mis sentimientos, y te diviertes a placer cuando siento los más ardientes deseos, parece que nunca quisieras ser mía, y entonces sin darme cuenta siento tu fría boca junto a la mía.

Aún sin título

Y me siento atrapado en el más antiguo de los duelos, en el más clásico de los conceptos, en el más fuerte de los tormentos, en la pelea entre el corazón y el cerebro, entre la razón y los sentimientos.

Y es lo más confuso de este mundo, me siento enredado cada segundo, en un momento soy libre y al siguiente todo está inconcluso, son las marañas de mi mente que me ganan cada pulso, es el poder del amor el que me imprime un nuevo impulso.

Es que al quererte te hago daño, y al ignorarte a veces simplemente te engaño, es que en ocasiones no sé qué hago, es que todo es realmente extraño.

Sin título

Y es la mujer de negro, que se oculta siempre tras aquél interesante velo, es ella, una y otra vez la que busca en mi corazón y me levanta del suelo, la misma que me hace feliz con un simple “te quiero”, que le da mil vueltas a mi alma con el más sincero de los besos, la del cabello rebelde, la del cuerpo de terciopelo, la que sin mirarme me descubre, la que al darme la espalda sucumbe, la que aun sin decirlo con locura me ama, y al verme mil pasiones descubre, es ella y solo ella la mujer de mis sueños, la muñeca de mis deseos, es ella el tesoro al que tanto deseo…

Sin título por ahora

Siento un fuerte deseo de matarte, derramando tu dulce sangre para que recorra todo mi cuerpo y lo impregne de tu sabor y tu aliento, porque si te mueres y no te tengo, para que querría entonces matarte con algún tipo innecesario de fundamento, si es más impactante poderte enloquecer y en un momento indefinido perderme contigo en un permanente shock cada vez más fuerte por la libido generada a partir de mi siniestro, pues me doy cuenta que no necesito nada más aparte de lo que tú me das, más allá de la sangre que ruboriza tu cuerpo, pues es todo lo que necesito para vivir, para ser cada segundo feliz, tu mi vida me encantas, me transformas cual alquimista en oro, me confundes como si fueras un loco tratando a un psicólogo, me privas hasta quitarme todo el aliento poco a poco, mi amor, eres tú y solo tú lo que yo en verdad tengo, lo que sin dudarlo sé que es mío, mío y totalmente auténtico, pues para que buscar en farsas la felicidad anhelada, cuando en tu verdad puedo encontrar cosas mas allá de lo que esperaba, cuando con cada respiro y con cada mirada siento que se puede llenar cada vacío que en la oscuridad antes me atormentaba, que con cada palabra, y con cada beso puedo sentir mi piel desgarrada, pues tu sabes llegar al interior de mi cuerpo, al interior de mi alma, con una simple mirada puedes seccionarme en mil partes y volver a juntarlas como si nada pasara.

Psidcodélico Amor

Quiero estar contigo, quiero sentirte en mi cuerpo, muy dentro de mí, casi llegando a mis sentimientos, en mi sangre, sintiendo como te desplazas por el aire y parece que con cada segundo tu efecto es más duradero, quiero que me lleves a uno de tus viajes, que prácticamente me saques de mí propio cuerpo y volando me hagas entrar en un sueño, que el mundo brille o simplemente sea en blanco y negro, que quiera correr o gritar, o simplemente quedarme quieto, que transites por mi sangre, por mi aire, pero que dentro de mi cuerpo me hagas olvidar el mundo por unos instántes, que cada uno de mis sentidos sea alterado e incluso mi propio nombre sea olvidado, llévame a ese mundo de ensueño (bueno o malo), para sacarme de este monótono infierno que me tiene atrapado, sácame y procuraré darte cada vez un uso mas apropiado, sácame y procuraré estar cada vez más a tu lado, tu amor es prohibido pero yo quiero que lo intentemos, para varias veces juntos llegar a lo más alto, quiero intentarlo, para en tu droga algún día morir soñando.

Poema a mi sombra

Belleza de lo oculto

Perfección de lo invisible
Cada día que pasa en mi vida
Me persigues como un demente

Cuando no te veo te extraño
Y me pregunto por qué no estás aquí?
Difícilmente me acostumbro
A que tengas una vida sin mí

Cuando la noche me asusta
Busco ayuda a tientas
Sin embargo no te veo, no te encuentro
Dónde estás? Realmente me inquietas

La duda me sofoca y temo por mi vida
Tengo frío y temo por mi alma
Guardián que cuida de mi cuerpo
Dónde estás? No me quites la calma

Tengo mil pesadillas
Y en cada una veo como me matas
Despierto con la luz del sol cada día
Con miedo de dejar mi cama

No eres Dios ni eres el Diablo
No eres el sirviente de ningún amo
Sin embargo estás atado a mí
Y estarás por siempre a mi lado

Vives por mí, vives para mí
No soy tu dueño pero sin mí no puedes vivir
Soy tu vida, soy tu muerte
Serás mi sombra para siempre

Sin título aun

Y es un suave frio el que se desliza por la piel de mi rostro, es un gélido sentimiento guiado por la sutileza de una lágrima al caer.

Representando el vacío de un sentimiento cuando dispuesto a ser más que eso, se encuentra bajo la lluvia junto a un alma muriendo en soledad.

Es la única muestra del dolor de un cuerpo que parece no querer aguantar, de un pedazo de alma que muriendo de tristeza se esconde bajo un abanico de ambigüedad.

Y al parecer no es la única muestra, no es solo una gota de sal la que se desliza por mi cara, es un torrente de aguas gélidas, que sin dudarlo, una y otra vez caen bajo el amparo de mi triste mirada.

Este es el indicio de mi muerte en vida, es la única razón por la que, tanto mis ojos como mi boca, prefieren hablar en un silencio esporádico cada minuto antes de que el alma se vuelva loca.

Es la única razón por la que mi cuerpo ya un inmenso dolor por si solo denota, uno que es tan grande y tan fuerte que no se puede quedar quieto y como unas cataratas se desborda.

Es el misterio de un amargo ser que se vio involucrado en el sueño más utópico que jamás imaginó, es la evidencia de un sueño que con la vehemencia de un espejo al ser arrojado contra el suelo se rompió.

Es la respuesta de unos pies que no quieren avanzar, es sin duda alguna la respuesta que me doy yo mismo cuando me voy cuenta que no tengo más razones para luchar.

Es la tan tergiversable forma de mostrar un sentimiento por medio físico, aquella misma que puede tornar la vida en un torbellino carente de bríos.

Y es que al ver cada gota que cae, y al saborear su salado gusto, me doy cuenta que no importa ni lo uno ni lo otro, que simplemente es mi alma la que veo verterse en trozos.

Es simplemente un vacio que no comprendo, es un dolor más fuerte que el más fuerte de los tormentos, que aunque no se puede expresar, es el mayor de mis lamentos.